Frío, frío!

Allá vamos!

Acá venimos!Y después hay que recuperar energías con chocolate caliente y galletitas

Cambio climático

O más bien yo lo llamaría shock climático, a esto de pasar del verano argentino al invierno sueco en un lapso de 24 horas. Acabamos de volver a Suecia después de tres semanas en Argentina que pueden resumirse básicamente en esto: 30 grados promedio, sol, pileta, todo el día sin pañal en bolas por el jardín, abuelos, tíos, ciruelas y duraznos juntados en el patio, invasión de parentela de media Argentina. (A los que no vi ni llamé les pido perdón pero fue un viaje relámpago que no dio tiempo para mucho más; será la próxima vez!)
Después de esos días de calor y buena vida estamos de regreso. Suecia nos recibió con 15 grados BAJO cero y nieve por todos lados. Ayer intenté salir con Emma a hacer las compras pero tuve que pegar la vuelta a mitad de camino porque empezó a gritar como una loca: "Fío! Fío!". Toda una escena en el medio de la calle. Y yo sin guantes ni gorro porque me los olvidé con el apuro. Volví a casa con Emma en crisis, los dedos con principio de congelamiento y sin sentir las orejas.
Hoy hicimos un nuevo intento con Patrik, con trineo y chocolate caliente incluido. Un fracaso total. Después de un rato Emma empezó a gritar de nuevo: "Fío! Fío" y al rato "Pico! Pico!" (es decir, General Pico, en La Pampa!). Mañana vamos a hacer otro intento a ver que sale...
Todo esto está documentado. Ya van a ver lo lindo que es Gotemburgo con nieve en las próximas entregas. Por ahora les mostramos un poco de nuestros días en el verano pampeano. Un abrazo!